Lichi
El lichi es el fruto del árbol de mismo nombre originario de China y que se cultiva en la actualidad de forma intensiva en grandes zonas de aquel país así como de La India, Vietnam, Tailandia... en general en países de clima tropical.
Su fruto tiene una piel dura y rugosa. Abriendo una pequeña incisión con la punta de un cuchillo, el fruto es relativamente fácil de pelar. Una vez eliminada la piel, descubriremos la pulpa, blanca y muy jugosa que aporta un aroma y sabor muy característico que recuerda poderosamente a las rosas. La pulpa recubre una pepita de gran tamaño que no se come.
Los lichis se pueden consumir crudos una vez ha alcanzado su maduración. Es muy habitual que el lichi se cocine en almíbar para luego distribuirlo en lata. En este formato mantiene una gran parte de su sabor original.