Perejil
El perejil es una hierba originaria de la cuenca del Mediterráneo cuyo uso y cultivo se ha extendido a todos los continentes. Existen cuatro variedades principales: el italiano o de Nápoles, el de hoja plana, el crespo y el perejil tuberosa. Son distintos sus aromas, siendo el de hoja plana el más intenso y el tuberosa con un sabor más suave y más cercano al apio.
Otra variedad de perejil se cultiva por su raíz y que se utiliza en la cocina de varios países de Europa central y del Este. Es una raíz muy gruesa que se lava y pela bien, y cuya carne tiene un exquisito sabor que acompaña muy bien sopas y guisos de carnes y aves.
El perejil está presente en la dieta de casi todos los países europeos donde no se suele servir crudo salvo como adorno y se suele combinar con ajo u otras especias. Desde las salsas verdes españolas, las persillades francesas mezcla de perejil, son muchos los ejemplos que podríamos dar. Pero también es un ingrediente estrella en la cocina de oriente medio donde es habitual comerlo crudo, como es el caso de las ensaladas de perejil libanesas o el tabulé marroquí.
El perejil se puede plantar fácilmente en casa, incluso en un tiesto pequeño lo que hace relativamente sencillo consumir perejil fresco que es mucho más aromático que el perejil seco. Es relativamente sencillo encontrar perejil en ramos en mercados y supermercados, y se conservará mejor si metemos los tallos en agua. Otra opción es picar el perejil, meterlo en paquetitos hechos con film de plástico y congelarlo. De esta manera conservará su aroma bastante bien.